Unas navidades mas, otro año que se nos queda atrás, queda un día pero como si fuera un 31 de diciembre, otro motivo por el que recordar este 2010 tan difícil, pero superado.Un año cargado de sorpresas, de miles de historias y momentos inolvidables, un año en el que se marchan grandes personas sin volver a saber de ellas, y llegan otras en su lugar, pero siempre estarán aquellas que año tras año, mes tras mes y día tras día continúan.
Un año en el cual puedo resaltar momentos inolvidables, minutos interminables, y por supuesto minutos veloces.
Desde el minuto uno, cuando termino la última campana, presentía que este podía mejorar los años anteriores, ¿por qué? Pues no lo sé. Espero que no fuera porque vi a Belén Esteban dar las campanadas, sería muy duro superar eso.
El mes de Enero fue cruel, muy duro y largo. Sin embargo, la víspera al viaje de París hacía tener el cuerpo a mil por hora.
Febrero y los carnavales fueron fugaces, eso sí, creo que los mejores carnavales de mis 17 años (claro Lorena, normal, es el primer año que sales, ah es verdad, qué tonta ). Al tener pegado ese fantástico viaje, lo transcurrido hasta Marzo, entre nervios y preparativos, reuniones y lo requerido para que todo fuese sobre ruedas fue veloz.
Recuerdo el viaje a París como algo simplemente impresionante. Una ciudad donde se respira amor, donde se respira magia, donde se respira pasión. Estoy absolutamente enamorada de París. Allí, quedaron risas y llantos, quedaron miradas y abrazos, quedaron momentos inolvidables, que sé que jamás olvidaré.
En esos meses donde daban comienzo al 2010, era todo casi perfecto, amistad, amor, el cariño de la familia, lo tenía todo, pero al completo, no era del todo cierto. Y a pesar que tuve que desengañarme en estos últimos instantes de que queda de año, creo que mereció la pena, y empezar un 2011, completamente limpio, cerrar esa puerta, que llaman desilusión y abrir otra la de tener ganas de amar.
Y hablando de esos recuerdos más bonitos, he de destacar ese recuerdo, que no solo, deseas, si no que, incluso sientes añoranza por él, sin ni siquiera haberlo vivido.
Era muy extraño, pero al fin, en este año, fui completamente feliz.Fueron dos días diferentes, distintos lugares, situaciones desiguales, pero sí, el mismo sentimiento. 3 años de espera, tan raro como conocer a una persona a través de una pantalla, saber todo sobre ella, y no haberla tocado, solo oído y haber llorado al ver, como esa persona iba triunfando, como esa persona se desgarraba, como esa persona iba construyendo una historia, con un final tan incierto a la misma vez que injusto.
El imaginar te ayuda a sentirte bien, a creer las cosas como tu quieres que sean, a tu gusto y opinión. Pero hay veces que el imaginar no te resulta como uno espera. Era imposible imaginar momentos imaginables, mágicos e inolvidables, imaginar risas e imaginar llantos.
La imaginación transmite inteligencia, y si digo la verdad me da igual no ser inteligente por no haber imaginado algo así. Esos minutos que estuve con ella, la verdad no puedo explicarlo.
Y espero, quiero y sé, que esto no acaba aquí, voy a volver a vivirlo, porque sentimientos como los que yo he vivido, es necesario sentirlos, para qué, cuando una agache la cabeza, esos recuerdos y momentos te hagan levantar, y sobre todo mirar hacia delante. Le debo tanto… Me encanta ver, como detrás de esa música, que hacer completamente SOÑAR, hay un corazón, como ella . Sabe perfectamente todo, que la quiero, y que me va a tener que aguantar mucho, pero que muchos años. ( Lo siento :) ) Te mando mil fuerzas para tí, que sé que las necesitas, que estaré SIEMPRE, nunca lo olvides. Todo camino tiene sus dificultades y cada uno se las tiene que arreglar pero teniendo lejos y a la vez cerca gente como tú, me a resultado mucho mas fácil, ahora es tu turno! Puedes con todo esto y más!
Por aquellas que cumplieron sus sueños, por aquellas que lucharon sin rendirse, por aquellas que más de una vez lloraron de pena y rieron de alegría, sobre todo, porque a pesar de los problemas, siempre tuvieron una sonrisa y nunca perdieron la ilusión.
Me gustaría dentro de 365 días poder estar de nuevo aquí, y solo cambiar el año del texto, pero las personas cambian, los momentos y las maneras de pensar... y como no sé que me depara el nuevo año, os deseo a todos lo mejor en este próximo 2011.
Y Puedo asegurar que si luchas por algo con todas tus fuerzas, esa lucha merecerá la pena.
Si deseas algo de todo corazón ese deseo de una manera u otra, se hará realidad.
Si tú quieres, ¡Nos vemos en el 2011!